Seguramente hayas pasado por esa situación en más de una ocasión y todavía no encuentras la fórmula correcta para renunciar y dejar sensaciones positivas.
Sin embargo, a diferencia de lo que puedas imaginar, puedes renunciar con estilo y elegancia, y evitar conflictos o escenas desagradables.
En esta publicación te enseñaremos cómo renunciar a un trabajo con estilo. Te diremos las formas correctas de dejar tu trabajo, evitar sensaciones y momentos incómodos o desagradables, y aumentar tus probabilidades de encontrar mejores oportunidades gracias a las referencias laborales que puedes incluir en tu hoja de vida en CVapp.
Cómo renunciar con estilo a un trabajo
Renunciar con estilo te ayudará a mantener relaciones profesionales positivas, preservar tu reputación, conseguir futuras referencias y cuidar tu bienestar emocional.
Suena bonito, pero seguramente te preguntarás: ¿y cómo lo hago?
Si bien cada caso es distinto, ya que no todos renunciamos por los mismos motivos – algunos porque están cansados o decepcionados de su trabajo, otros porque encontraron mejores oportunidades, o salario más alto–, hay procedimientos estándares que puedes seguir al pie de la letra.
Aquí algunos para renunciar con estilo y elegancia:
Comunícaselo en persona a tu jefe
Lo ideal es que se lo comuniques a tu jefe, supervisor o encargado de recursos humanos, personalmente. Evita decírselo primero a tu compañero de trabajo, o departamento, ya que los rumores corren rápido, y pueden tomar por sorpresa a tus superiores.
Si se enteran por chismes de pasillo, o por terceras personas malintencionadas, lo más probable que tu imagen quede manchada.
En cambio, si vas de frente, con días o semanas de antelación, quedarás como una persona honesta.
Por más incómodo o molesto que te sientas, no lo comuniques por WhatsApp ni por correo electrónico. Con la revolución tecnológica, muchas personas acuden a los canales digitales para anunciar su despido. Y esto es un error. Te percibirán como poco profesional o que no puede enfrentar sus responsabilidades.
Hazlo personal y diplomático.
Déjalo por escrito
Incluso si ya lo anunciaste, todavía tienes que dejar tu carta de renuncia por escrito. Esto trae consigo varias ventajas, como cuidarte las espaldas en aspectos legales, dejas plasmado el día de tu renuncia y puedes detallar mejor los motivos de tu renuncia.
Si bien no hay un esquema general para la carta de renuncia, estas partes no pueden faltar:
- Encabezado con nombre de la empresa, a quien va dirigido y fecha del anuncio.
- Cuerpo de la carta con los motivos de tu renuncia.
- Despedida final y agradecimiento.
- Firma, nombre y documentos de identidad.
Ofrece una transición suave
Pregunta cómo puedes ayudar a transferir tus responsabilidades y proyectos a un nuevo empleado o compañero de equipo. Ofrécete a guiar o capacitar a tu reemplazo. Esto demostrará tu profesionalismo y compromiso.
Mantén una actitud positiva
Esto es clave para renunciar a un trabajo con estilo. Son muchos los trabajadores que se despiden de su puesto de trabajo de malas maneras. Incluso con problemas con los empleadores y parte del equipo.
Como resultado, el ambiente se torna incómodo y negativo.
Esto no es bueno para nadie. Incluso si estás emocionalmente afectado y molesto, continúa cumpliendo con tus responsabilidades y brinda apoyo a tus compañeros de trabajo.
Evita cualquier tentación de disminuir tu rendimiento o hablar negativamente sobre la empresa antes de irte.
Recuerda que no sabes las vueltas que dará la vida, y puede que en un futuro necesites referencias para mejorar tu currículo, o volver a tu puesto de trabajo.
Son cosas que suceden más de lo que imaginas y debes trabajar en los días previos a tu renuncia. Busca quedar lo mejor parado posible.